El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, denunció este viernes que un posible cese temporal del fuego en Ucrania podría representar un nuevo intento de engaño por parte del régimen de Kiev, al advertir que Moscú no aceptará pausas que sirvan como respiro estratégico en el conflicto.
Peskov señaló que cualquier iniciativa orientada a imponer un alto el fuego sin abordar las causas profundas del conflicto no será aceptada por Rusia. Afirmó que el objetivo del Kremlin no es una tregua provisional, sino la consecución de una paz auténtica y sostenible.
“Si se pretende crear un pretexto para exigir una pausa en el frente, eso no funcionará. Nuestro objetivo es trabajar por la paz, no por un simple alto el fuego”, expresó el vocero presidencial.
El funcionario enfatizó que Moscú apuesta por una solución que sea comprendida por todas las partes y respaldada por garantías firmes que aseguren su cumplimiento a largo plazo. En ese sentido, reiteró que cualquier acuerdo debe ser duradero y verificable.
Las declaraciones de Peskov se producen luego de que el presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, planteara la necesidad de un alto el fuego con el argumento de organizar elecciones en Ucrania, una propuesta que ha generado críticas debido a que su mandato presidencial expiró en mayo de 2024.
Zelenski también sugirió la posibilidad de realizar un referéndum sobre cuestiones territoriales vinculadas a su plan de paz, incluyendo la eventual creación de una zona económica especial en Donbass, dejando la decisión en manos de la población ucraniana.
Desde Moscú, estas iniciativas son vistas con escepticismo, al considerar que podrían formar parte de una estrategia política más que de un esfuerzo genuino por alcanzar una solución definitiva al conflicto.












