Jimmy Carter, líder histórico y símbolo de la diplomacia internacional, falleció este domingo 29 de diciembre a los 100 años, según confirmó su hijo. Aunque no se reveló la causa exacta, Carter había suspendido en 2023 el tratamiento contra un melanoma agresivo que afectó su hígado y cerebro. Su vida marcó un antes y un después en la política y la diplomacia global.
Un legado que trasciende fronteras
Jimmy Carter gobernó Estados Unidos entre 1977 y 1981, enfrentando desafíos como el deterioro de las relaciones con la Unión Soviética y la crisis de los rehenes en Irán. Aunque perdió la reelección frente a Ronald Reagan, su impacto se amplió tras su salida de la Casa Blanca.
En 1982, fundó junto a su esposa Rosalynn el Centro Carter, una organización enfocada en promover la democracia, los derechos humanos y la erradicación de enfermedades en comunidades marginadas. Su trabajo humanitario incluyó misiones en Haití, país con el que la República Dominicana comparte historia y frontera.
En 2002, Carter recibió el Premio Nobel de la Paz por sus esfuerzos en la mediación de conflictos globales, incluyendo los de Etiopía, Eritrea, Bosnia y Haití, reafirmando su compromiso con la justicia y la paz mundial.
Vínculos con la República Dominicana y el Caribe
Durante su carrera humanitaria, Carter demostró un interés particular por América Latina y el Caribe. En Haití, jugó un papel mediador clave durante tensiones políticas, un esfuerzo que resonó en la República Dominicana por el impacto compartido en la región.
En 2019, Jimmy Carter se convirtió en el presidente más longevo de la historia de Estados Unidos al superar los 95 años, un récord que consolidó su singular lugar en la política estadounidense.
El adiós a un ícono global
La muerte de Carter ocurre un año después del fallecimiento de Rosalynn Carter, su compañera de vida durante más de siete décadas. Ambos compartieron un compromiso incansable por un mundo más equitativo.