Israel lanzó este jueves una serie de ataques aéreos sobre Beirut, la capital del Líbano, dejando al menos 22 muertos y 117 heridos, según el Ministerio de Salud libanés. Los ataques se concentraron en las zonas de Ras al-Nabaa, al-Nuwairi y los alrededores de Beshara al-Khoury, según reportó la cadena MTV Líbano.
El objetivo preliminar del bombardeo podría haber sido Wafiq Safa, cuñado del fallecido líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah. Safa, quien ocupaba un alto cargo en el sistema de seguridad interna de Hezbolá, es visto como una figura clave dentro del movimiento chiita, siendo descrito en ocasiones como el "ministro de Defensa" de la organización.
Imágenes y videos difundidos en redes sociales y medios locales muestran columnas de humo negro que se alzan sobre los edificios afectados por los bombardeos, mientras equipos de rescate trabajan en las zonas impactadas.
Uno de los ataques alcanzó un edificio de varios pisos, el cual quedó completamente destruido, según reportes de la cadena Al-Manar. También se registraron heridos en la zona de al-Nuwairi, donde las autoridades locales han pedido a los ciudadanos mantenerse alejados de los lugares del ataque para facilitar las labores de rescate.
Por su parte, medios israelíes informan que los ataques fueron dirigidos contra dos instalaciones vinculadas a Hezbolá, junto con el edificio destruido, y sugieren que el ataque fue parte de un contraataque selectivo.
La tensión en la región sigue en aumento tras semanas de enfrentamientos entre Israel y el Líbano, y estos ataques se suman a la creciente inestabilidad en la zona.