La Oficina del alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha revelado un informe alarmante sobre las condiciones a las que han sido sometidos los palestinos detenidos por las fuerzas israelíes desde el ataque de Hamás del 7 de octubre. El informe detalla actos atroces de tortura, como el ahogamiento simulado, la privación del sueño, y el uso de descargas eléctricas, entre otros métodos inhumanos. Además, se ha denunciado que perros de ataque han sido soltados contra los detenidos, en clara violación de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario.
Volker Turk, el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, expresó su profunda preocupación por las condiciones “deplorables” en las que se encuentran los palestinos detenidos en instalaciones militares y prisiones israelíes. Hasta la fecha, se ha confirmado la muerte de al menos 53 detenidos palestinos bajo custodia israelí desde el 7 de octubre, lo que subraya la gravedad de la situación.
Según el informe de la ONU, los palestinos han sido trasladados desde Gaza a Israel sin que se les informara sobre las razones de su detención ni se les permitiera el acceso a abogados o a una revisión judicial adecuada. La mayoría de ellos han sido retenidos en condiciones de aislamiento y sometidos a torturas severas.
Volker Turk ha reiterado la necesidad de que todos los rehenes y detenidos palestinos, que han sido capturados arbitrariamente, sean liberados de inmediato. Asimismo, ha hecho un llamado urgente a la comunidad internacional para que intervenga y garantice que se respeten los derechos fundamentales de los detenidos.
Las denuncias de la ONU subrayan la intensificación del conflicto en la región y la grave crisis de derechos humanos que enfrentan los palestinos bajo la ocupación israelí. A medida que continúan las tensiones, la comunidad internacional observa con preocupación las consecuencias de las acciones militares y las violaciones de derechos humanos en la región.