En medio de la nueva escalada de tensión entre Serbia y Kosovo, Moscú reafirma su apoyo a Belgrado en defensa de su soberanía, declaró el jefe del 4.º departamento europeo de la Cancillería rusa, Yuri Pilipsón, a RIA Novosti.
"Cualquier decisión sobre Kosovo debe ser aceptable para los serbios y avalada por el Consejo de Seguridad de la ONU. […] Seguiremos apoyando a Belgrado en la defensa de sus derechos legítimos, soberanía e integridad territorial", recalcó el alto diplomático.
Este viernes, unidades policiales kosovares irrumpieron en varios edificios administrativos al norte de Kosovo, de mayoría étnica serbia, con el objetivo declarado de ayudar a los nuevos alcaldes, de origen albanés, a ejercer sus funciones. El despliegue policial, que tuvo lugar en medio de episodios de enfrentamiento con residentes y de colocación de banderas de Kosovo en edificios municipales, llevó al presidente serbio, Alexándar Vucic, a declarar el estado de preparación militar máxima en el Ejército del país.