El cantante mexicano Kalimba ha sido acusado por segunda vez de acoso sexual, ahora por supuestamente haber tocado indebidamente sin consentimiento a una colega, Melissa Galindo, famosa por participar en el programa de televisión 'La Voz'.
A través de una transmisión en vivo en Instagram*, la mujer contó que en 2020 Kalimba la invitó a ser parte de su disquera y después de eso empezó a ser víctima de acoso por parte del cantante.
"Creí que nunca iba hablar de este tema, porque yo la verdad no quería más escándalos. Nunca me ha gustado estar en esa parte del medio", afirmó Melissa.
"Sentí su mano hacia arriba"
Según su relato, la primera vez que la tocó sin su consentimiento fue luego de un concierto en la ciudad de Monterrey, cuando ambos habían tomado unos tragos y Kalimba decidió llevarla a su hotel en una camioneta.
Galindo afirma que Kalimba se sentó a su lado y de pronto sintió que algo tocó sus partes íntimas. "La neta, entré en 'shock', me cerré, pero no dije nada, porque dije: 'capaz fue sin querer, para qué hago un lío, ahorita ni al caso'", contó.
Sin embargo, según la mujer, el acoso no acabó ahí y Kalimba intentó manosearla por segunda vez cuando se dirigían a una fiesta. "Me vuelve a agarrar la rodilla y me vuelve a decir lo mismo y volví a sentir la mano hacia arriba, pero esta vez movió los dedos y ahí sí me shockeé, me volví a cerrar y me fui aterrada a su casa", recordó.
Al llegar al lugar, el cantante le hizo una propuesta sexual, que Melissa rechazó tajantemente. "Kalimba me empezó a decir: 'Vamos arriba a una cogida rápida, nadie se va a enterar'", relató.
Después de ese episodio, Melissa contrató a un abogado para deshacer el contrato que tenía con la disquera de Kalimba.
Acusaciones anteriores
Se trata de la segunda vez que Kalimba enfrenta acusaciones de este tipo. Hace 13 años, el cantante se vio envuelto en la polémica tras ser acusado de violación por una menor de edad. En enero de 2011, fue detenido en Texas y entregado a las autoridades mexicanas.
No obstante, Kalimba salió ese mismo mes en libertad luego de que el juez considerara que no había elementos suficientes para que siguiera en prisión.
Melissa conocía ese incidente y dijo que incluso habló con el cantante al respecto, queriendo escuchar "su versión de los hechos".
"En nombre de Dios, me dijo que no había hecho nada y yo creí", afirmó. Posteriormente, guardó silencio durante mucho tiempo sobre lo que le ocurrió porque subestimó la situación y trató de excusarlo, ya que, según ella, no la violó. "Al final, es un delito también, y es maltrato también, y es acoso", destacó.
Hasta el momento, Kalimba no ha hecho ninguna declaración al respecto.