Las autoridades de Rusia han condecorado a los pilotos de los cazas que escoltaron al dron de combate, vigilancia y reconocimiento MQ-9 Reaper de EE.UU. que cayó en el mar Negro a inicios de semana, anunció este viernes el Ministerio de Defensa ruso.
El ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, "ha entregado condecoraciones estatales a los pilotos de los aviones Su-27 que impidieron que el avión no tripulado estadounidense MQ-9 violara los límites de la zona de uso temporal del espacio aéreo establecida para los fines de la operación militar especial", indica el comunicado.
El organismo resalta que los límites de la zona se comunicaron a todos los usuarios del espacio aéreo internacional y se publicaron de acuerdo con las normas internacionales.
Desde Washington denunciaron el martes que dos cazas rusos Su-27 interceptaron el dron "de manera arriesgada", al punto de que uno de los aviones "colisionó" con el aparato, golpeándolo en la hélice y haciendo que se precipitara sobre las aguas internacionales del mar Negro.
Por su parte, Moscú negó cualquier contacto entre los cazas y el dron, que, según la parte rusa, perdió el control y altitud tras realizar una brusca maniobra, hasta estrellarse en el agua.
Según el Ministerio de Defensa de Rusia, el dron se dirigía hacia el espacio aéreo ruso con los transpondedores apagados y violó las restricciones temporales impuestas sobre parte del mar Negro con motivo de la operación militar especial en Ucrania.
Serguéi Shoigú, y su homólogo estadounidense, Lloyd Austin, abordaron el miércoles el incidente en una conversación telefónica que mantuvieron por iniciativa de la parte norteamericana.
En una rueda de prensa ofrecida el mismo día, Austin calificó el comportamiento de los aviones rusos de "peligroso, imprudente y poco profesional", y dijo que el episodio "es parte de un patrón de acciones agresivas, arriesgadas e inseguras" de los pilotos rusos en el espacio aéreo internacional.
Sin embargo, desde la cartera rusa de Defensa indicaron el incidente con el dron fue causado por "las acciones estadounidenses de incumplimiento de la zona de restricción de vuelo" establecida por Moscú en relación con su operativo militar especial, así como por "el aumento de las actividades de reconocimiento contra los intereses de Rusia".
En esta línea, Shoigú subrayó que la presencia de vehículos estadounidenses no tripulados frente a las costas de la península de Crimea tiene "un carácter provocador" y puede dar lugar a una escalada de la situación en la zona del mar Negro, lo que la parte rusa definitivamente no está buscando. El Kremlin continuará respondiendo a todas las provocaciones de manera proporcionada, declaró.
- Los MQ-9A Reaper tienen una envergadura de 20 metros y pueden permanecer en el aire más de 24 horas. Estos drones, con capacidad de carga útil de unos 1.740 kilogramos, se usan principalmente para ejecutar tareas de inteligencia y reconocimiento, aunque también tienen capacidad de portar armamento.