Estudios publicados en Nature Health y British Medical Journal concluyen que las bolsas de nicotina reducen el consumo diario de cigarrillos y la exposición a carcinógenos.
Nuevas evidencias científicas respaldan el uso de las bolsas de nicotina oral como una alternativa menos nociva frente al consumo de cigarrillos convencionales. Dos estudios publicados en las reconocidas revistas Nature Health y British Medical Journal concluyen que estos productos pueden contribuir a reducir el consumo de tabaco y, en consecuencia, la exposición a carcinógenos derivados del mismo.
El primero de ellos, titulado “Prevalencia, seguridad y papel de las bolsitas de nicotina en el abandono del tabaco entre los fumadores”, fue publicado en Nature Health y contó con la participación de 657 fumadores. Los resultados revelan que el 21.2 % de los participantes había probado las bolsitas de nicotina y el 18.4 % consideró que estos productos pueden ayudar a dejar de fumar. Entre quienes las habían utilizado, el 41 % reportó haber dejado de fumar con éxito, mientras que el 38.1 % indicó una reducción parcial en su consumo de cigarrillos.
El estudio, de carácter descriptivo, evaluó la prevalencia y los efectos secundarios de las bolsitas de nicotina, concluyendo que los propios usuarios respaldan su efectividad como herramienta para dejar de fumar, en consonancia con tendencias globales de reducción de daños por tabaquismo.
Por su parte, una investigación reciente de la Universidad de Yale (Connecticut, EE.UU.), publicada en el British Medical Journal, reafirma que las bolsas de nicotina reducen significativamente el consumo diario de cigarrillos y los niveles de carcinógenos, en particular el NNAL, un compuesto específico del tabaco.
El estudio, realizado con 30 adultos fumadores durante cuatro semanas, divididos en grupos que utilizaron bolsitas con diferentes concentraciones de nicotina (3 mg y 6 mg), demostró una disminución notable del consumo de cigarrillos y una alta adherencia al tratamiento, ya que 29 de los 30 participantes completaron el proceso.
Los investigadores concluyen que los resultados proporcionan “un respaldo preliminar al uso de las bolsitas de nicotina como sustituto de los cigarrillos” y que las presentaciones con mayor concentración de nicotina (6 mg) podrían tener un impacto más fuerte en el comportamiento de los fumadores adultos dispuestos a cambiar sus hábitos.