Israel está considerando la posibilidad de utilizar agua de mar para inundar la extensa red de túneles bajo la Franja de Gaza, utilizada por militantes de Hamás para introducir y sacar bienes del enclave palestino, moverse sin ser detectados entre los edificios y retener rehenes, informó The Wall Street Journal el lunes, citando fuentes familiarizadas con el asunto.
Según el diario, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) terminaron de montar grandes bombas, que pueden utilizarse con este fin, aproximadamente a 1,5 kilómetros al norte del campo de refugiados de Al Shati, a mediados del mes pasado. El periódico señaló que se trata de al menos cinco bombas que pueden trasladar agua extraída del mar Mediterráneo a los túneles, inundándolos en cuestión de semanas con una velocidad de miles de metros cúbicos por hora.
Israel informó a EE.UU. de esta opción a principios del mes pasado, lo que provocó un debate, en el que se sopesaron las consecuencias medioambientales de la posible destrucción de túneles y el valor militar de la operación, revelaron al medio los funcionarios estadounidenses. Sin embargo, afirmaron que no sabían lo cerca que estaba el Gobierno israelí de llevar a cabo el plan, ya que, al parecer, el país hebreo aún no ha tomado una decisión final.
Posibles consecuencias medioambientales
A su vez, el periódico informó que el sentimiento estadounidense está dividido, ya que algunos funcionarios expresaron su preocupación por el plan, y otros apoyaron la inutilización de los túneles. Dicha división de opiniones puede deberse a que, según los expertos, se desconoce cuál será el impacto del bombeo de agua de mar en las infraestructuras y alcantarillado existentes, cómo afectará a las reservas de aguas subterráneas y cómo afectará a la estabilidad de los edificios cercanos.
Algunos también expresaron su preocupación por la operación y su posibilidad de agravar la crisis humanitaria que vive el enclave palestino y arrastrar materiales peligrosos fuera de los túneles, contaminando aún más el suelo. Además, WSJ indicó que la realización del plan israelí podría poner a la Administración del presidente estadounidense Joe Biden en una posición difícil, y posiblemente provocar la condena mundial.
A pesar de la ambigüedad de la reacción que puede suscitar la inundación de túneles, una persona familiarizada con el asunto aseguró al diario que el proceso duraría semanas y permitiría la salida de los combatientes de Hamás y, potencialmente, de los rehenes. "No estamos seguros del éxito que tendrá el bombeo, ya que nadie conoce los detalles de los túneles y el terreno que los rodea", dijo. "Es imposible saber si será eficaz porque no sabemos cómo drenará el agua del mar en túneles en los que nadie ha estado antes", agregó.
Un funcionario de las Fuerzas de Defensa de Israel declinó hacer comentarios sobre el plan de inundación, pero declaró que están "trabajando para desmantelar las capacidades terroristas de Hamás utilizando diversas herramientas militares y tecnológicas".
Se informa que, en total, los israelíes han identificado hasta ahora unos 800 túneles, aunque reconocen que la red, cuya longitud se estima en casi 500 kilómetros, es mayor.
- Según el Ministerio de Sanidad de Gaza, entre el 7 de octubre y el 4 de diciembre por la tarde, al menos 15.899 palestinos murieron en los ataques al enclave, de los que aproximadamente el 70 % eran mujeres y niños.
- Los combates han agravado la crisis de agua que sufre la Franja de Gaza. Según la ONU, los palestinos no reciben más de tres litros al día, frente al mínimo saludable de 15 litros.