El presidente ruso, Vladímir Putin, declaró este viernes que con el inicio del nuevo mandato presidencial de Donald Trump se abre una ventana de oportunidad para recomponer las deterioradas relaciones entre Rusia y Estados Unidos.
“Las relaciones entre Moscú y Washington se encuentran a un nivel extremadamente bajo. Pero con la llegada del presidente Trump, creo que por fin se vislumbra esa luz al final del túnel”, afirmó Putin durante un encuentro con trabajadores del sector nuclear ruso.
El mandatario ruso recordó la reunión que sostuvo con Trump el pasado 15 de agosto en Alaska, a la que describió como “muy buena, significativa y sincera”. Según destacó, los contactos diplomáticos y técnicos ya se han reanudado entre ministerios, departamentos y empresas de ambos países.
“Espero sinceramente que los primeros pasos que se han dado sean solo el comienzo de una restauración completa de nuestras relaciones”, expresó Putin, aunque advirtió que la evolución dependerá de la disposición de Washington y de sus compromisos dentro de alianzas como la OTAN.
Putin resaltó además que confía en las “cualidades de liderazgo” de Trump como garantía para avanzar en la recomposición de los vínculos bilaterales.
El contexto histórico refuerza la relevancia de sus palabras: durante la administración anterior en EE.UU., las relaciones ruso-estadounidenses tocaron su punto más bajo desde la Guerra Fría, con diálogos prácticamente interrumpidos. Ahora, con el regreso de Trump a la Casa Blanca, se han retomado las conversaciones telefónicas, los contactos de delegaciones y un canal diplomático directo.
El propio Trump declaró tras la cumbre que “llevarse bien con Putin es algo bueno”, subrayando que mantener un vínculo constructivo con Rusia es clave debido al enorme poder nuclear que comparten ambas naciones.