Los presidentes Donald Trump (EE.UU.) y Vladímir Putin (Rusia) sostuvieron este jueves una nueva conversación telefónica, continuando así la serie de contactos diplomáticos que mantienen desde mediados de junio. La llamada, según informó el Kremlin, se desarrolló en un tono “franco, empresarial y concreto” y duró aproximadamente una hora.
La comunicación inició con Trump compartiendo detalles sobre el avance de sus reformas fiscales y migratorias en el Congreso estadounidense, en lo que fue también una felicitación anticipada por parte de Putin con motivo del Día de la Independencia de EE.UU., que se celebra este 4 de julio.
Putin aprovechó para recordar los lazos históricos entre ambos países, desde la Guerra de Independencia hasta su alianza en la Primera y Segunda Guerra Mundial.
Enfoque diplomático sobre Oriente Medio e Irán
Uno de los puntos centrales del diálogo fue la situación en Oriente Medio, especialmente en torno a Irán. Putin insistió en la necesidad de resolver los conflictos regionales “exclusivamente por la vía político-diplomática”, en contraste con la reciente retórica militarizada observada en la región.
Ambos mandatarios acordaron mantener los canales de diálogo abiertos a través de sus ministerios de Exteriores, Defensa y asesores presidenciales, en un esfuerzo por reducir tensiones y mantener una vía directa de comunicación sobre los principales focos de conflicto global.
Ucrania: negociaciones y firmeza rusa
La crisis ruso-ucraniana también estuvo presente en la conversación. Trump volvió a instar a un pronto cese de hostilidades, mientras que Putin reiteró la disposición de Moscú a seguir con las negociaciones humanitarias iniciadas en Estambul.
No obstante, dejó claro que Rusia “se atenderá a los objetivos que se propuso”, los cuales implican la eliminación de las causas fundamentales del conflicto. “No se renunciará a estos”, subrayó el asesor presidencial ruso, Yuri Ushakov.
Relaciones bilaterales y cooperación estratégica
En el plano bilateral, ambos líderes destacaron su interés en proyectos económicos conjuntos, incluyendo iniciativas en los sectores energético y espacial, reafirmando que, pese a las diferencias geopolíticas, se mantienen espacios de cooperación estratégica entre las dos potencias.
Esta llamada se suma a las conversaciones telefónicas sostenidas el 14 y 17 de junio, en las cuales abordaron la escalada entre Israel e Irán, así como avances en los acuerdos con Ucrania.
La dinámica de contactos frecuentes entre Putin y Trump refuerza una narrativa de diplomacia directa de alto nivel que contrasta con los modelos multilaterales más comunes en tiempos recientes.