Este fin de semana, una familia de la torre Da Silva 3 en el exclusivo sector de Piantini enfrentó una tragedia. Adelle Ruiz León, madre de dos meses, y su bebé perdieron la vida a causa de una intoxicación, mientras que su esposo y otro hijo se encuentran hospitalizados, al parecer, por la misma causa. Las autoridades mantienen un hermético silencio sobre los detalles de la sustancia venenosa involucrada.
Según informes, los hechos ocurrieron luego de que un vecino presuntamente fumigara para eliminar una plaga de carcoma en su cocina. Antonia Martínez, quien trabajaba con la familia, relató que Ruiz León se sintió mal, fue llevada a un centro de salud y regresó pensando que se encontraba mejor.
El domingo, unidades del Cuerpo de Bomberos y la Dirección Central de Investigación se presentaron en la torre tras conocer la noticia. Las autoridades, excepto un representante del Ministerio de Salud Pública, se negaron a proporcionar detalles, confirmando únicamente la muerte de la madre y la bebé, así como la hospitalización de una tercera persona.
Se presume que la intoxicación fue causada por gas fosforado, vertido en un apartamento desocupado el viernes, viajando a través de los conductos de aire acondicionado entre los apartamentos. Expertos en fumigación señalan que esto viola los protocolos de seguridad, ya que dicha sustancia debe utilizarse en espacios cerrados con medidas de protección adecuadas.
Ante esta tragedia, el doctor Alejandro Báez destaca la necesidad de un Centro de Información Toxicológica en el país, señalando que la falta de información rápida y precisa en emergencias toxicológicas pone en riesgo la vida de los ciudadanos. Además, resalta la importancia de este centro en la prevención, educación y concientización sobre el manejo seguro de productos químicos en hogares e industrias.