Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) comenzaron a bombear agua de mar en un conjunto de túneles del movimiento palestino Hamás en la Franja de Gaza, informó 'The Wall Street Journal' citando a funcionarios estadounidenses. Sin embargo, existe la posibilidad de que haya rehenes en los túneles.
De acuerdo con funcionarios estadounidenses, inundar los túneles podría llevar varias semanas. Un portavoz del ministro de Defensa israelí declinó hacer comentarios, alegando que las operaciones de los túneles son clasificadas.
El medio agrega que en las grabaciones entre el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y los rehenes liberados y sus familias que se filtraron la semana pasada, los ciudadanos decían airadamente a Netanyahu que temían que la inundación de los túneles matara a sus seres queridos.
Por su parte, el presidente estadounidense, Joe Biden, destacó que Estados Unidos no sabe si hay rehenes en los túneles de Hamás inundados por Israel en la Franja de Gaza.
El 5 de diciembre, las FDI anunció que militares israelíes destruyeron 500 de los más de 800 pozos de acceso a la red de túneles de Hamás en lo que dura la operación terrestre en la Franja de Gaza.
Las autoridades israelíes señalaron que el sistema subterráneo de Hamás ha sido clave para sus operaciones en el campo de batalla. El sistema de túneles, añadieron, es utilizado por Hamás para maniobrar a los combatientes a través del campo de batalla y almacenar los cohetes y municiones del grupo, y permite a los líderes del grupo comandar y controlar sus fuerzas.
El 1 de diciembre, al expirar la tregua humanitaria, pactada hace una semana con la mediación conjunta de Catar, Egipto y Estados Unidos, las tropas de Israel reanudaron sus ataques contra la Franja de Gaza alegando supuestos disparos por parte de las milicias del movimiento palestino Hamás.
La nueva espiral del conflicto palestino-israelí, desatada con el ataque sorpresa que Hamás lanzó el pasado 7 de octubre, ha causado hasta la fecha unos 1.200 muertos y cerca de 5.500 heridos en Israel y más de 18.500 muertos y 36.000 heridos en Gaza, según los últimos datos oficiales.
Numerosos países instan a Israel y Hamás a establecer un alto el fuego; también se multiplican las voces a favor de una solución de dos Estados como única vía posible para lograr una paz duradera en la región.