El experimento de comunicaciones ópticas en el espacio profundo (DSOC, por sus siglas en inglés) de la NASA, a bordo de la nave espacial Psyche que se encuentra a 16 millones de kilómetros de distancia de la Tierra, envió recientemente un láser infrarrojo cercano con datos de prueba al Telescopio Hale en el observatorio Palomar de Caltech, California (EE.UU.).
Si bien se ha logrado la comunicación óptica en la órbita terrestre baja y en la Luna, esta es la demostración de comunicaciones ópticas más lejana jamás realizada, pues la nave se encuentra 40 veces más lejos que la distancia de la Luna a la Tierra. Psyche viaja actualmente hacia el cinturón de asteroides principal entre Marte y Júpiter con la misión de estudiar el asteroide homónimo, cuando llegue allí en 2028.
La demostración tecnológica de DSOC podría transformar la forma en que se comunican las naves espaciales, pues el experimento está configurado para enviar a la Tierra datos en un gran ancho de banda. Durante la prueba, los fotones del DSOC tardaron unos 50 segundos en viajar de Psyche a la Tierra, pero en la distancia más alejada de la nave de nuestro planeta, los fotones tardarán unos 20 minutos en regresar.
El hito de la primera luz
A mediados de este mes, la demostración técnica logró su "primera luz". Para esto, una baliza láser de enlace ascendente emitida desde el observatorio terrestre ayudó al transceptor a bordo a apuntar su láser de enlace descendente de regreso a Palomar mientras los sistemas automatizados afinaron su orientación. Dirigir un rayo láser a millones de kilómetros requiere "apuntar" con extrema precisión, detallan los expertos. El procedimiento logró "cerrar el enlace" con el envío simultáneo de láseres ascendentes y descendentes. Estos fotones láser luego se convierten en bits de información electrónica.
"Lograr la primera luz es uno de los muchos hitos críticos del DSOC en los próximos meses, allanando el camino hacia comunicaciones de mayor velocidad de datos capaces de enviar información científica, imágenes de alta definición y transmisión de video en apoyo del próximo gran salto de la humanidad: enviar humanos a Marte", comentó Trudy Kortes, directora de Demostraciones Tecnológicas de la Dirección de Misiones de Tecnología Espacial en la sede de la NASA, en Washington.
"La prueba […] fue la primera en incorporar completamente los recursos terrestres y el transceptor de vuelo, lo que requirió que los equipos de operaciones de DSOC y Psyche trabajaran en conjunto", explicó Meera Srinivasan, líder de operaciones del experimento en JPL. "Conseguir la primera luz es un logro tremendo", subrayó Abi Biswas, tecnólogo del proyecto DSOC en el JPL, agregando que también pudieron "enviar algunos datos", lo que significa que lograron "intercambiar 'bits de luz' desde y hacia el espacio profundo".
Las ventajas de la comunicación óptica en el espacio profundo
El experimento DSOC tiene como objetivo demostrar velocidades de transmisión de datos de 10 a 100 veces mayores que los sistemas de radiofrecuencia de última generación utilizados actualmente por las naves espaciales. Esto ayudará a futuras misiones de exploración humana y robótica y respaldará instrumentos científicos de mayor resolución.
"La comunicación óptica es una bendición para los científicos e investigadores que siempre quieren más de sus misiones espaciales y permitirá la exploración humana del espacio profundo", señaló Jason Mitchell, director de la División de Tecnologías Avanzadas de Comunicaciones y Navegación de la NASA. "Más datos significan más descubrimientos", añadió.