Alejandro Toledo, expresidente de Perú, se entregó este viernes a las autoridades de Estados Unidos para enfrentar el proceso de extradición a su país, informó a CNN la Corte de Distrito del Norte de California.
El tribunal agregó en su mensaje que había recibido confirmación del Servicio de Alguaciles de Estados Unidos de que el exmandatario ya estaba bajo su custodia.
Minutos después, el servicio informó que "Alejandro Toledo Manrique está bajo custodia de EE.UU.". El Departamento de Justicia también lo confirmó, aunque no proporcionó mayor información al señalar que "por una política de larga data, por cuestiones de seguridad y protección de los agentes de la ley que escoltan, no comentamos sobre el momento de las posibles entregas".
Toledo se entregó a las autoridades luego de que un juez del Distrito de Columbia en Estados Unidos rechazara este jueves el último esfuerzo de su defensa por impedir la extradición.
Según un documento judicial que obtuvo CNN, la defensa de Toledo presentó el recurso de emergencia para suspender temporalmente la detención y posterior extradición mientras se resuelve una moción de reconsideración que está pendiente en su caso, la cual fue presentada el miércoles.
A su vez, ese recurso de emergencia se produjo horas después de que un juez federal de California le ordenara al expresidente que se entregara el viernes ante agentes federales para cumplir con su extradición.
Según la decisión del juez, Toledo "será recluido en una cárcel apropiada, donde permanecerá hasta que se concluya su entrega a las autoridades peruanas".
El exmandatario cumple arresto domiciliario en California desde 2019, en respuesta a una solicitud de extradición enviada a Estados Unidos en mayo de 2018. Las autoridades en Perú lo señalan de cargos de colusión y lavado de activos. Toledo ha negado las acusaciones y las ha tildado de persecución política.
¿De qué acusan a Toledo?
Según la Fiscalía de Perú, Toledo, quien gobernó el país entre 2001 y 2006, habría recibido hasta US$ 30 millones en presuntos sobornos de la constructora brasileña Odebrecht para favorecer a la empresa en la obtención de contratos en el país.
El caso cuenta con un testimonio brindado a inicios de 2017 por el exrepresentante de la empresa brasileña en Perú, Jorge Barata. Este último le dijo a la Fiscalía que le había entregado dinero al empresario Josef Maiman, entonces amigo de Toledo, presuntamente destinado al exmandatario. El supuesto objetivo era favorecer a la compañía en la obra de la carretera Interoceánica.
La Fiscalía sostiene que la empresa Odebrecht le entregó a Maiman más de US$ 30 millones para Toledo. Maiman, quien murió en 2021, se convirtió en colaborador eficaz en la investigación a Toledo.
Además, Toledo enfrenta otra solicitud de extradición, aún en trámite ante las autoridades de EE.UU., por un caso adicional: el de Ecoteva. Toledo declaró en esa investigación ante la fiscal en 2014. El exmandatario dijo que era inocente, como lo hizo también frente a las cámaras de CNN en mayo de 2017, meses después de que la justicia de Perú dictara prisión preventiva en su contra por ambos casos.
El caso Ecoteva fue la primera investigación que se le inició a Toledo en Perú en 2013 y se le acusa del delito de lavado de activos. La Fiscalía investiga la compra de dos propiedades en Lima a nombre de su suegra y el pago de hipotecas de dos bienes, propiedad del exmandatario.
La Fiscalía sostiene que esas operaciones se cancelaron con el dinero de Ecoteva Consulting Group, una empresa formada en Costa Rica y registrada en un paraíso fiscal, y de la cual la suegra del exmandatario era presidenta. De acuerdo a la Fiscalía, la compra y pago de las hipotecas de los inmuebles se habría hecho con dinero que la empresa Odebretch presuntamente dio al exmandatario.