El mandatario venezolano, Nicolás Maduro, anunció que evalúa la puesta en marcha de un decreto de conmoción exterior para enfrentar las amenazas militares de Estados Unidos. Según explicó, la resolución permitiría activar “todas las fuerzas de la sociedad venezolana” en defensa de la soberanía nacional.
El Consejo de Estado, encabezado por la vicepresidenta Delcy Rodríguez y otras altas autoridades, respaldó la iniciativa señalando que busca proteger la paz y la integridad territorial ante lo que consideran “una agresión inédita motivada por las riquezas energéticas del país”. Rodríguez alertó que el Caribe debe preocuparse por el riesgo de un conflicto regional.
De acuerdo con el artículo 338 de la Constitución venezolana, este tipo de decreto puede aplicarse cuando un conflicto externo amenace gravemente la seguridad nacional. Tiene una duración inicial de 90 días, prorrogables por igual período.
El anuncio llega después de que EE.UU. intensificara operaciones militares en el Caribe. El propio Donald Trump ratificó en la ONU que continuará con bombardeos para, según él, eliminar “terroristas venezolanos” vinculados a Nicolás Maduro, aunque sin presentar pruebas. Caracas denunció incursiones ilegales y la destrucción de embarcaciones, acciones que ya han sido condenadas por varios gobiernos regionales como “ejecuciones sumarias”.