El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reconoció este martes que Israel recibió severos daños en la reciente confrontación con Irán, calificando los ataques como “muy intensos” y destacando el uso de tecnología misilística avanzada por parte de Teherán.
“Israel fue golpeado muy fuerte. Especialmente en los últimos días, fue golpeado muy fuerte”, declaró Trump en rueda de prensa. “Esos misiles balísticos destruyeron muchos edificios”, añadió.
Misiles de alta tecnología
El conflicto se intensificó tras el ataque israelí del 13 de junio contra instalaciones nucleares iraníes. Como respuesta, Irán lanzó al menos 20 oleadas de misiles, incluyendo los poderosos Khyber, con 2.000 km de alcance, y los misiles hipersónicos Fattah-1, que alcanzan velocidades de hasta Mach 15 y están diseñados para eludir sistemas de defensa como la Cúpula de Hierro israelí.
Tregua cuestionada
El 24 de junio, Trump anunció un acuerdo de alto al fuego entre ambas naciones, afirmando:
“Israel e Irán vinieron a mí, casi simultáneamente, y me dijeron: ‘¡Paz!’. Sabía que el momento era ahora”.
Sin embargo, horas después, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, acusó a Irán de haber violado la tregua y ordenó una ofensiva aérea contra Teherán. Irán negó las acusaciones y denunció que fue Israel quien rompió el pacto.
Trump posteriormente culpó a ambas partes por incumplir el alto al fuego, instando a que respeten el acuerdo para evitar una escalada global.
Reacciones internacionales
Rusia, China y varios países de América Latina han condenado enérgicamente las acciones de Tel Aviv. Moscú reiteró que los ataques israelíes contra instalaciones nucleares iraníes constituyen una violación del derecho internacional y una amenaza a la seguridad regional y mundial.