El gobierno francés obligará a las tiendas con aire acondicionado a cerrar sus puertas y a apagar la publicidad lumínica por la noche, todo ello con el fin de intentar reducir el uso de energía, indica euronews.
La ministra de Transición Energética, Agnes Pannier-Runacher, dice que es "absurdo" dejar las puertas abiertas mientras el aire acondicionado funciona, ya que puede generar un 20% más de consumo de energía.
Los establecimientos que no cumplan con esta nueva medida, con excepción de aeropuertos y estaciones, se enfrentarán a una multa de 750€.
Algunas ciudades como Bourg-en-Bresse, Lyon, Besançon y París ya contaban con estas medidas a nivel municipal desde mediados de julio, pero el gobierno ahora quiere expandir esta iniciativa por todo el país.
Actualmente se aplica una prohibición de publicidad luminosa entre la 1:00h y las 6:00h en pueblos y ciudades con menos de 800.000 habitantes, las nuevas regulaciones la harían aplicable sin importar el tamaño de la población.
ANPCEN, una asociación francesa que hace campaña contra la contaminación lumínica, afirma que el desafío radica en hacer cumplir las normas, lo que actualmente no sucede en muchas ocasiones.