SANTO DOMINGO.-La pérdida de cabello afecta tanto a hombres como a mujeres, pero son las féminas quienes se preocupan con mayor frecuencia por evitarla.
El doctor Hugo Ávila Lamarche, director Médico de HAL Aesthetic Clinic, explica que la mesoterapia capilar tiene como objetivo frenar la caída del pelo, estimular su crecimiento, fortalecer la hebra, corregir la producción de sebo o simplemente aportar nutrientes.
“La gran mayoría de las afecciones capilares se pueden corregir con una mesoterapia, pero deben ser diagnosticadas por un médico especialista en el área.
Este proceso sirve para detener la caída del pelo, que dicho sea de paso puede ser multi factorial, por lo que es necesario determinar cuál es la causa y la mejor opción de tratamiento para el paciente, ya que existe más de una sola mezcla de principios activos”, describe el médico estético, quien tienen un Master en Armonización Facial, Tricología y Cosmiatría Estética.
Estimula el crecimiento
Resalta que la mesoterapia estimula el crecimiento de una manera íntegra donde se puede obtener un pelo saludable en el aspecto del fortalecimiento, engrosamiento y brillo, pues los principios activos son un cóctel que se inducen bajo la afección del paciente, “los nutrientes pueden ir desde el aporte de aminoácidos, pépticos, oligoelementos, ácidos (como la Vitamina C o Ácido Hialurónico) vitaminas y minerales todos con el fin de trabajar sobre la deficiencia capilar”.
Al preguntarle ¿quién califica para el procedimiento? El doctor puntualiza que tanto hombres como mujeres pueden utilizar este maravilloso procedimiento.
Agrega: “Suelen ser las mujeres las que más acuden a la consulta para su cuidado, sin embargo, los hombres deben saber que también es algo que ellos pueden utilizar como recurso para evitar llegar a tratamientos extremos como la cirugía capilar”.
“Con esto hago el énfasis que un diagnóstico correcto y a tiempo puede dar la solución ideal para ese paciente (hombre o mujer) que se vea en la necesidad de usar este tratamiento”. Ávila Lamarche indica que el novedoso tratamiento se empieza a aplicar en pacientes a partir de los 30 años de edad, pues es cuando los radicales libres y otros múltiples factores tiene efecto en el cuerpo humano, “no negando la posibilidad de ciertas excepciones en pacientes menores de este rango de edad, siempre que haya sido estudiado y analizado su caso”.
Luego de tener el diagnóstico, el especialista explica que se indica una serie de sesiones, las cuales pueden variar de un paciente a otro, “pudiendo ser cinco como un mínimo y hasta 10 sesiones como un punto máximo, haciendo énfasis en la problemática del paciente”.
Añade que muchas veces coadyuvando las sesiones con el uso de vitaminas o suplementos orales, lociones y shampoo de uso médico para potencializar el tratamiento del paciente.