Especialistas de la NASA lograron el viernes recuperar el contacto con la sonda Voyager 2, con la que perdieron las comunicaciones a finales de julio, comunicó la agencia espacial estadounidense. La institución señaló que la nave volvió a proporcionar datos telemétricos y científicos, lo que indica que el aparato funciona normalmente y que está en la trayectoria de vuelo programada.
La conexión se perdió tras ser enviados "inadvertidamente" una serie de comandos que causaron que su antena se desviara dos grados. Esta se restableció luego de que se transmitiera "el equivalente a un 'grito' interestelar" desde una instalación en Canberra (Australia) que forma parte de la Red de Espacio Profundo, explicó la agencia.
Desde la NASA explicaron que la señal enviada a la sonda, que está a más de 19.900 millones de kilómetros de distancia, instruía a la nave que se reorientara y volviera su antena hacia la Tierra. El aparato recibió la señal 18,5 horas después, por lo que los controladores de la misión tardaron 37 horas en saber si el comando había funcionado.