El despliegue de las fuerzas de la Alianza Atlántica en Ucrania tendrá graves consecuencias para Estados Unidos, declaró el viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov. El vicecanciller agregó que es Washington el que decide qué medidas debe tomar el bloque bélico, y no el presidente anterior o actual del organismo.
El 8 de junio, el exsecretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen declaró que algunos países de la Alianza podrían querer enviar sus tropas a Ucrania si Kiev no recibe garantías concretas en la cumbre del bloque prevista para los días 11 y 12 de julio en Vilna.
El presidente ruso anunció, el 24 de febrero, el lanzamiento de una operación militar especial para defender las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, frente al genocidio cometido por parte de Kiev. Uno de los objetivos fundamentales de la operación militar especial es la desmilitarización y desnazificación de Ucrania.