El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, informó en una conferencia de prensa que el águila con simbología nazi hallada en el 2006 en el buque de guerra alemán Graf Spee será fundida para convertirla en una paloma de la paz.
El águila en cuestión tiene una esvástica bajo sus garras y perteneció al Graf Spee, un sofisticado buque de guerra del Tercer Reich hundido en la bahía de Montevideo tras una batalla con naves británicas en 1939.
Según indicó el mandatario, la idea de que la figura "sufriera una transformación virtuosa" y se convirtiera "en un símbolo de paz y unión", como es la paloma, le ha acompañado desde antes de asumir la presidencia.
La nueva obra, agregó Lacalle Pou, estará a cargo del artista Pablo Atchugarry y, de manera preliminar, se ha propuesto colocarla en la desembocadura del Río de la Plata, en el Atlántico.
"La idea de transformar un símbolo del odio, de la guerra, de la atrocidad, en un símbolo de paz me hace sentir muy honrado y con mucha responsabilidad", comentó Atchugarry, quien estimó que la pieza podría estar lista en noviembre.
Del rescate a la Justicia
En 2006, luego de 67 años del hundimiento, una expedición de una empresa privada uruguaya recuperó el águila de bronce de 2,74 metros de altura y 350 kilos de peso. Quienes rescataron la pieza, entre ellos el empresario Alfredo Etchegaray, querían subastarla; no obstante, las autoridades de la época lo impidieron, por temor a atraer a simpatizantes del nazismo.
En principio, el águila se exhibió en un hotel de Montevideo, pero luego fue trasladada a un recinto militar, donde se encuentra bajo custodia de la Armada de Uruguay.
Posteriormente, el caso pasó a la Justicia. En junio de 2019, la jueza Gabriela Rodríguez Marichal ordenó al Estado uruguayo vender la pieza y repartir a medias las ganancias con los empresarios que organizaron el rescate de esa pieza. No obstante, recientemente un tribunal determinó que esta es propiedad de la nación.
Noticia gracias a Actualidad Rt.