La Comisión Europea aprobó este lunes la adquisición del gigante estadounidense de videojuegos Activision Blizzard por Microsoft, que pagará 69,000 millones de dólares, tres semanas después de un veto británico que pone en entredicho la fusión.
La Comisión, órgano ejecutivo de la Unión Europea (UE), indicó en un comunicado que Microsoft se había comprometido a respetar medidas que garantizan la competencia en el mercado de los juegos en línea.
Estos compromisos "solucionan plenamente los problemas de competencia levantados por la Comisión", añadió.
Microsoft, que ya posee Xbox, se embarcó hace más de un año en la adquisición de Activision Blizzard, fabricante de juegos icónicos como "Call of Duty", "World of Warcraft" y "Candy Crush".
Si la operación se concreta, Microsoft se convertirá en la tercera compañía de videojuegos por facturación, por detrás de Tencent y el japonés Sony, fabricante de la PlayStation.
La Comisión Europea, que vela por la aplicación de la normativa de competencia en el bloque de 27 países, había abierto en noviembre un examen sobre esta fusión.
Pese a la luz verde anunciada este lunes, el futuro de la adquisición sigue siendo incierto.
La habían bloqueado
La Autoridad británica de Competencia y Mercados (CMA) anunció el 26 de abril su decisión de bloquearla, con el argumento de que afectaría la competencia en el sector.
Pero Microsoft apeló. "Esta decisión refleja una incomprensión de este mercado y de cómo funciona la tecnología en la nube", declaró el grupo.
La luz verde de Bruselas debería darle argumentos de peso para impugnar la decisión de la CMA ante el Tribunal de Apelación de la Competencia (CAT) en el Reino Unido.
"Si Microsoft no gana el recurso ante el CAT, no podrá seguir adelante con la adquisición aunque la Comisión Europea la apruebe", explicó Anne Witt, especialista en derecho de la competencia de EDHEC (Francia).
"A menos que Microsoft decida abandonar el mercado británico, pero eso parece poco probable", agregó.