La vicepresidenta Raquel Peña pidió al liderazgo nacional mantenerse unido frente a la crisis haitiana, para evitar el surgimiento de líderes mesiánicos y extremistas que atenten contra la paz social.
Advirtió que las sociedades penetradas por inmigrantes que huyen de crisis parecidas a las que hoy enfrenta Haití, “pueden terminar secuestradas por liderazgos mesiánicos de la extrema derecha o izquierda”.
Puso como ejemplo a Europa, donde aseguró que los flujos migratorios similares han provocado que surjan “liderazgos extremistas que, poco a poco, han ido erosionando el atractivo que el centro debe tener en las grandes mayorías”.
Para evitar esas consecuencias, la vicemandataria cree que debe evitarse la división. Consideró que la República dominicana, hasta el momento, no ha abierto sus puertas a ideologías y poses políticas extremas, de izquierda ni derecha.
“Si nos dividimos, podríamos abrir las puertas al surgimiento de ofertas políticas extremas, de derecha o izquierda, que podrían atentar contra la paz social, el activo más valioso que hemos acumulado durante las últimas seis décadas”, sostuvo Peña.
Por eso tildó de oportuno el llamado hecho por el presidente Luis Abinader para lograr “un acuerdo sensato sobre cómo enfrentar el choque externo que la crisis haitiana nos está transmitiendo”.
Agregó que “el problema de la permanente y cada vez más grave crisis haitiana y la amenaza que se cierne sobre nuestro territorio generada por una inmigración creciente y no regularizada, no debe provocar divisiones en la población”.
Raquel Peña hablaba sobre la paz social como uno de los logros más importantes de la nación dominicana de las últimas décadas en su discurso frente a la Cámara Americana de Comercio (AMCHAMDR).
Peña destacó el aporte de la mujer en el desarrollo económico que ha experimentado la República Dominicana y mostró estadísticas sobre la participación de la población femenina en diferentes áreas de la economía.