La Fiscalía de Santiago someterá un recurso de apelación en rechazo a la decisión de un tribunal de la Instrucción que dejó en libertad a cuatro integrantes de una estructura criminal de tráfico de drogas que operaba en varias regiones del país y que tras un seguimiento continuo fueron interceptados y arrestados en un parqueo de un residencial de Santiago en medio de una transacción de 11 kilos de cocaína.
La decisión emanada de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente, fue tomada por la jueza Kimberly Tatis, quien alega que para dicho seguimiento los agentes actuantes necesitaban autorización judicial.
El órgano persecutor considera que la decisión es desacertada, improcedente y carente de toda lógica procesal, en tanto que envía a las calles a cuatro integrantes de una organización criminal en cuyo poder se ocuparon 11 kilos de cocaína y otros paquetes de marihuana, que serían objeto de una transacción frustrada, además de ocupárseles vehículos, armas de fuego y dinero en efectivo.
El Ministerio Público reitera que “el tráfico y la comercialización de drogas constituyen una grave amenaza para la seguridad pública y la salud de las personas”, y, que, por tanto, la lucha contra este flagelo “debe ser visibilizada, enfrentada en el territorio y en los tribunales, en razón de que este crimen potencia la ocurrencia de otros delitos y su insistencia no debe ser tomada a la ligera”.
El citado tribunal decidió libertad pura y simple, por la supuesta falta de una orden para allanar, en favor de Pedro José Baldera Mancebo, Edwin Manuel Cuevas González, Erick David Castro, y Francisco Alberto Rodríguez Villanueva, en tanto que impuso medidas poco gravosas contra Francisco Raúl Torres Cohen, a quien ordenó la presentación de una garantía económica de $10,000 pesos en efectivo, prohibición a salir del territorio dominicano y presentarse mensualmente ante el órgano acusador.
La frustrada transacción de narcóticos fue posible tras la instalación de equipos interagenciales que durante varias horas se movilizaron desde Santo Domingo Este hasta Santiago, persiguiendo los vehículos.
En el operativo de interdicción que culminó en un residencial del este de la ciudad de Santiago, las autoridades apresaron en flagrancia a los cinco imputados, a quienes les ocuparon 10 paquetes de una sustancia en polvo que se presume es cocaína, con un peso aproximado de 11.5 kilogramos, en el interior de un yip Kia Sorento.
En otro vehículo, Hyundai Sonata, color blanco, en poder de los procesados, se incautó, en un compartimiento secreto (caleta), un paquete de lo que se presume es marihuana, así como una pistola marca Taurus con su cargador y cápsulas.
Otras pistolas incautadas son una Heckler & Koch, calibre 40, con su cargador y ocho cápsulas, y una marca Smith and Wesson, así como más de un centenar de municiones.
Además de la citada cantidad de presunta marihuana, se ocuparon otras tres porciones de ese mismo vegetal, así como una trituradora y una mochila en cuyo interior había $86,050 pesos y 25 dólares estadounidenses.
En la medida de coerción la Fiscalía establece que esta estructura criminal transportaba drogas desde Santo Domingo Este a Santiago, para posteriormente enviarlas a Estados Unidos y Europa.
Los procesados enfrentan cargos por violación a los artículos 4, 5, 6, 7, 8 y 9 de la Ley 50-88 sobre Drogas y Sustancias Controladas, en la categoría de traficantes, en tanto que Castro y Torres Cohen se le adicionan los delitos contemplados en los artículos 66 y 67 de la Ley 631-16 por el porte y tenencia de armas de fuego sin la documentación que establece la ley.