El exasesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton, se entregó este viernes 17 de octubre a las autoridades federales tras ser imputado por mal manejo de material clasificado, en el marco de una investigación por retención y divulgación no autorizada de información de defensa nacional.
De acuerdo con Fox News, Bolton fue visto entrando a la Corte Federal en Greenbelt, Maryland, donde enfrenta 18 cargos presentados por el Departamento de Justicia.
Acusaciones en su contra
La acusación formal sostiene que, entre abril de 2018 y agosto de 2025, Bolton abusó de su posición como asesor de Seguridad Nacional al compartir más de mil páginas de información sobre actividades de seguridad y defensa nacional con personas no autorizadas.
Los documentos habrían contenido información clasificada “de nivel máximo de secreto” e incluían referencias a estrategias de seguridad internacional y operaciones aliadas.
El Departamento de Justicia también lo acusa de guardar ilegalmente documentos oficiales y notas de seguridad nacional en su residencia en Maryland, violando las normas de custodia de información confidencial.
“No se tolerará el uso de la Justicia como arma, y este FBI no se detendrá ante nada para llevar ante la Justicia a cualquiera que amenace nuestra seguridad nacional”, declaró el director del FBI, Kash Patel.
Investigación y hallazgos
La causa se originó tras un allanamiento realizado el 22 de agosto de 2025 en la vivienda de Bolton, donde agentes del FBI incautaron teléfonos, computadoras, discos duros y documentos rotulados con títulos como “Trump I–IV” y una carpeta marcada “Declaraciones y reflexiones sobre los ataques aliados”.
Los fiscales sostienen que Bolton extrajo archivos desde la Casa Blanca y los envió a familiares a través de un servidor privado, lo que constituye una violación de las leyes federales sobre el manejo de registros clasificados.
De ser declarado culpable, podría enfrentar hasta 25 años de prisión.
Postura de la defensa
En declaraciones a Associated Press (AP), Bolton afirmó que se ha convertido en “un objetivo político” dentro de los intentos de la actual administración de “usar el Departamento de Justicia para acusar a sus enemigos”.
Por su parte, su abogado, Abbe Lowell, aseguró que los cargos se basan en una interpretación errónea de los hechos y que los documentos en cuestión corresponden a diarios personales que Bolton compartió solo con su familia más cercana.
“Bolton llevaba diarios, eso no es un delito”, afirmó Lowell, insistiendo en que su cliente actuó dentro de los límites legales y sin intención de comprometer la seguridad nacional.
🇺🇸 Contexto político
John Bolton, conocido por su postura de línea dura en política exterior, fue uno de los principales asesores de Donald Trump entre 2018 y 2019, y se distanció del expresidente tras su salida de la Casa Blanca.
Su imputación ocurre en un momento de creciente tensión política en Washington, marcada por múltiples investigaciones sobre manejo de información clasificada por parte de exfuncionarios de alto nivel.