SpaceX sigue haciendo avances en la exploración espacial con el lanzamiento exitoso de su quinto vuelo de prueba del sistema Starship este domingo desde Boca Chica, Texas. El Starship, considerado el cohete más grande y poderoso de la historia, logró un hito al completar el primer aterrizaje del propulsor Super Heavy, utilizando una estructura conocida como 'Mechazilla'.
El cohete, compuesto por dos elementos completamente reutilizables, incluye una primera etapa llamada Super Heavy y una segunda conocida como Starship. Tras el despegue, el Super Heavy se separó de la nave espacial y regresó al sitio de lanzamiento, donde fue atrapado por los 'palillos chinos', unos brazos robóticos de la torre de lanzamiento que aseguran un aterrizaje suave.
Este avance marca un paso crucial para SpaceX en su objetivo de hacer que los vuelos espaciales sean completamente reutilizables. Después de más de una hora de vuelo, la nave Starship también regresó exitosamente a la Tierra, amerizando en el océano Índico.
"¡Confirmado el amerizaje! ¡Enhorabuena a todo el equipo de SpaceX por el emocionante quinto vuelo de prueba de Starship!", celebró la empresa en sus redes sociales.
Impacto del vuelo de prueba
Este éxito sigue a un vuelo anterior en junio, en el que tanto el Super Heavy como la nave Starship lograron aterrizar intactos en el océano, demostrando las capacidades de reutilización de SpaceX.
El objetivo de la compañía liderada por Elon Musk es utilizar el sistema Starship para futuras misiones a la Luna, Marte y otros destinos espaciales, haciendo más accesible la exploración y los viajes espaciales con cohetes completamente reutilizables.