Un promedio de 700 casos nuevos de cáncer de mama se diagnostican cada año en el Instituto Oncológico Dr. Heriberto Pieter, en su mayoría captados en etapa III, o sea, en estadios muy avanzados y el 20% presenta metástasis.
Así lo reveló ayer la oncóloga clínica Millyant Rojas, especialista del departamento de mamas del centro de salud especializado en cáncer, al señalar que de esos 700 diagnósticos que se realizan, el 99% corresponde a mujeres y el uno por ciento a hombres.
Entiende de suma importancia que en el país se siga trabajando en la orientación y educación de la población sobre la necesidad del chequeo preventivo para poder detectar los casos en etapas tempranas, que garantizan una sobrevida del 100%.
“El diagnóstico en estadios avanzados de la enfermedad sigue siendo una problemática, y lo más importante es diagnosticar temprano para impactar la enfermedad”, señaló.
Nueva terapia
Rojas fue entrevistada durante el acto de lanzamiento del nuevo medicamento Enhertu (trastuzumab deruxtecán / T-DXd) de la farmacéutica AstraZeneca para personas diagnosticadas con cáncer de mama positivo para el receptor dos del factor de crecimiento epidérmico humano (HER2) que no se puede extirpar mediante cirugía y se ha diseminado a otras partes del cuerpo, o sea, que ha hecho metástasis.
La nueva molécula fue presentada ayer en el país a comunicadores del área de la salud, con la participación de expertos en el manejo de cáncer de mama. El mismo está disponible a nivel privado y en planes Premium de seguros médicos. Sus representantes procuran que sea incluido en el Plan Básico de Salud.
Es un medicamento de segunda línea y aplica en pacientes que han recibido un tratamiento anti-HER2 previo contra el cáncer de mama para metástasis, o para quienes tienen un cáncer de mama que ha regresado durante o dentro de los seis meses posteriores a completar el tratamiento en etapa temprana.
De acuerdo a la farmacéutica, fruto de la evidencia generada en el estudio clínico DESTINY-Breast03, las Guías Internacionales actualizaron recientemente la recomendación de tratamiento en segunda línea (tratamiento que se administra cuando el tratamiento inicial o de primera línea no es eficaz o deja de ser eficaz) y establecieron a Enhertu como “régimen preferido”.
Esto, agrega, porque sus resultados reflejan números muy positivos, mostrando una supervivencia sin progresión de alrededor de 28 meses en comparación con el promedio de siete meses que ofrecen otros tratamientos, lo que reduce un 67% la progresión de la enfermedad.
Indica que también demostró que ofrece una mejora, tanto en la supervivencia sin progresión (cantidad de tiempo que una persona vive sin que el cáncer avance), como en la supervivencia general (cantidad de tiempo que una persona vive con o sin crecimiento del cáncer).
Esto en personas diagnosticadas con cáncer de mama metastásico con niveles bajos de HER2 que han recibido una terapia sistémica previa en el entorno metastásico o desarrollado recurrencia de la enfermedad durante o dentro de los seis meses posteriores a la finalización de la quimioterapia adyuvante.