MOSCÚ (Sputnik) — La OTAN está cada vez más involucrada en el conflicto de Ucrania, los riesgos de un enfrentamiento con Rusia aumentan y los cazas F-16, vuelen desde donde vuelen, serán un objetivo legítimo de destrucción, declaró la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, al comentar la posible transferencia de dichos cazas a Ucrania.
La vocera subrayó que "los riesgos de un choque militar directo entre Rusia y la OTAN no hacen más que aumentar".
De acuerdo con Zajárova, dado que una parte significativa de la infraestructura de aeródromos de Ucrania ha sido destruida, es posible que los cazas estadounidenses tengan su base en países como Polonia, Eslovaquia o Rumanía.
Países Bajos, junto a Dinamarca, fueron los primeros en acordar el suministro de los cazas F-16 a Ucrania. La ministra de Defensa neerlandesa, Kajsa Ollongren, declaró anteriormente que su país espera enviarlos a Kiev en 2024 y además planea mandar unos 12-18 cazas de este tipo al centro de entrenamiento en Rumanía para la capacitación de los pilotos ucranianos.
A su vez, la Casa Blanca confirmó que Ucrania recibirá los aviones de combate de terceros países una vez finalizada la formación de sus pilotos.
Numerosos países condenaron la operación militar especial que Rusia lanzó en Ucrania el 24 de febrero de 2022 y apoyan a Kiev con suministros de armas, donaciones, ayuda humanitaria y sanciones contra Moscú.
Rusia, por su parte, envió notas de protesta a todos los países que suministran armas al país vecino. El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, advirtió que los países occidentales que apoyan a Ucrania se están convirtiendo en parte del conflicto y cualquier cargamento con armas para Kiev pasará a ser un blanco legítimo para las Fuerzas Armadas rusas.