El Comité de Investigación de Rusia anunció la apertura de una causa penal por terrorismo tras un intento de atacar con drones la residencia del presidente ruso, Vladímir Putin, en el Kremlin la noche del 2 al 3 de mayo.
La noche del 2 al 3 de mayo, los militares y servicios especiales de Rusia lograron inutilizar dos drones con el uso de sistemas de guerra radioelectrónica sobre la residencia del líder ruso en el territorio del Kremlin.
El Kremlin calificó el ataque frustrado como "un atentado terrorista planeado e intento de magnicidio contra el presidente de la Federación de Rusia".
Por su parte, Kiev negó ser el responsable del ataque con drones contra la residencia del presidente ruso.
El suceso provocó que las autoridades de Moscú decidieran prohibir a partir de este 3 de mayo los vuelos de los drones en la ciudad, excepto los permitidos por las instituciones federales.