El presidente de Rusia, Vladímir Putin, declaró que su país “no amenaza a nadie”, sino que desarrolla su potencial nuclear y estratégico conforme a lo anunciado desde hace años. Las declaraciones fueron ofrecidas durante una ceremonia de condecoración a los científicos y técnicos que participaron en el desarrollo del misil de crucero de alcance ilimitado Burevéstnik y el sumergible no tripulado Poseidón.
Putin subrayó que ambos proyectos tienen un “significado histórico” que se extenderá a todo el siglo XXI, destacando su papel dentro del plan de modernización del arsenal ruso.
“El alcance del Burevéstnik supera al de todos los misiles conocidos, y los principios del Poseidón servirán de base para el desarrollo de nuevos sistemas no tripulados”, explicó el mandatario, quien también resaltó que el sumergible puede alcanzar velocidades y profundidades sin precedentes, superando los mil metros bajo el mar.
El presidente reveló que durante las pruebas del Burevéstnik fue detectado un buque de la OTAN realizando labores de reconocimiento, sin que esto afectara el resultado de los ensayos.
Producción del misil hipersónico Oréshnik
Putin también anunció el inicio de la producción en serie del misil balístico Oréshnik, un nuevo proyectil de alcance intermedio capaz de impactar objetivos a una velocidad de Mach 10 (casi 3 km por segundo). Según explicó, la potencia destructiva del Oréshnik puede equipararse a la de un ataque nuclear.
El misil, con un alcance de hasta 5.500 kilómetros, fue utilizado por primera vez en combate el 21 de noviembre de 2024, cuando destruyó la planta ucraniana Yuzhmash, en Dnepropetrovsk, un complejo industrial que, según Moscú, fabricaba tecnología militar para Kiev.
“Todo lo que estamos haciendo está dentro de los planes de desarrollo conocidos desde hace tiempo. Rusia, como todas las potencias nucleares, continúa fortaleciendo su capacidad estratégica”, reiteró Putin.











