La esperada reunión entre los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y de Estados Unidos, Donald Trump, comenzó este viernes en la base militar Elmendorf-Richardson en Anchorage, Alaska, con una primera conversación cara a cara, asistidos por traductores.
Ambos mandatarios se saludaron en la alfombra roja del aeropuerto y posaron frente a un cartel con el lema “Persiguiendo la paz”, antes de dirigirse juntos en la limusina presidencial estadounidense hacia el lugar de las negociaciones.
El formato inicial incluyó una reunión tres por tres, con altos funcionarios clave de ambas partes, seguida por sesiones ampliadas con las delegaciones y un desayuno de trabajo. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, estimó que las conversaciones podrían extenderse entre seis y siete horas.
Delegaciones y Temas Clave
Por Rusia participan, entre otros, el ministro de Exteriores Serguéi Lavrov, el asesor presidencial Yuri Ushakov, el ministro de Defensa Andréi Beloúsov y el titular de Finanzas Antón Siluánov.
Por Estados Unidos, acompañan a Trump el secretario de Estado Marco Rubio, el secretario de Comercio Howard Lutnick, el director de la CIA John Ratcliffe y el secretario del Tesoro Scott Bessent.
El tema central es la resolución del conflicto ucraniano, con Moscú expresando optimismo sobre un eventual “reinicio” de relaciones bilaterales.
Contexto y Reacciones
La cumbre se desarrolla en medio de denuncias rusas sobre supuestas provocaciones ucranianas para boicotear el encuentro, y de advertencias de Kiev y la Unión Europea sobre el riesgo de que Trump acepte propuestas de paz sin la participación ucraniana.
El presidente ucraniano Vladímir Zelenski calificó el encuentro como una “victoria personal” para Putin y amenazó con no reconocer los resultados si no se incluye a su país en las decisiones.