La OTAN busca ampliar su influencia en la región Asia-Pacífico, invitando a los líderes de Corea del Sur, Japón, Australia y Nueva Zelanda a visitar la cumbre que se celebrará esta semana en Vilna, Lituania. Será su segunda reunión consecutiva con la alianza, después del encuentro en Madrid.
Causas de acercamiento
En su Concepto Estratégico, adoptado en 2022, la OTAN calificó la zona Asia-Pacífico de "importante para la OTAN, dado que los acontecimientos en esa región pueden afectar directamente la seguridad euroatlántica". Además, es la primera vez que el documento doctrinario de la alianza determina que la política y las aspiraciones de Pekín son el mayor desafío a su seguridad, intereses y valores. También hizo hincapié en la cooperación creciente entre China y Rusia, percibida por Occidente como una amenaza para el orden internacional basado en reglas.
Dada la necesidad de contener a Pekín, la OTAN se complementa con alianzas como AUKUS y el Quad que ya cumplen con este objetivo en la estrategia de Washington.
Entretanto, Nikkei reportó la semana pasada que Japón y Australia negociaron con la OTAN un Programa de Asociación Individualizada (ITPP, por sus siglas en inglés) que consiste en 16 áreas de cooperación -entre ellas, seguridad marítima, ciberseguridad, amenazas híbridas, espacio, cambio climático y tecnologías emergentes y disruptivas- con tres objetivos estratégicos: fortalecer el diálogo, reforzar interoperabilidad y aumentar resiliencia. Se anuncia también que la alianza prepara documentos similares de cooperación con Corea del Sur y Nueva Zelanda.
Críticas y obstáculos
Al mismo tiempo, el ex primer ministro de Australia, Paul Keating, calificó el pasado domingo de "tonto supremo" al secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, por su aspiración a aumentar los lazos de la alianza con Asia en sus intentos por contener a Pekín. Según el expolítico, Stoltenberg cree que "China tiene que ser supervisada por Occidente y circunscrita estratégicamente". "Stoltenberg, en su visión ictérica, ignora el hecho de que China representa un 20 % de la humanidad y ahora tiene la mayor economía del mundo […] y no tiene antecedentes de haber atacado a otros Estados, a diferencia de EE.UU.", señaló.
A su vez, Francia declaró su oposición a los planes de la OTAN de ampliar su alcance en Asia mediante la apertura de una oficina de comunicaciones en Japón, que sería el primer puesto avanzado de la Alianza en la región.
"No estamos a favor por una cuestión de principios", afirmó el viernes pasado el presidente francés, Emmanuel Macron. "Las propias autoridades japonesas nos han dicho que no están muy de acuerdo", agregó. Según Politico, el mandatario se opuso a un mayor enfoque de la OTAN en China, argumentando que es una organización militar se limita geográficamente al Atlántico Norte.
Además, Nikkei reportó este lunes que la OTAN pospuso su decisión de abrir la oficina de comunicaciones en Tokio hasta el otoño o aún más tarde, pese a que inicialmente se lo había planteado para la cumbre en Vilna.
Enfoque de Seúl
De acuerdo con la oficina del mandatario surcoreano, Yoon Suk-yeol, citada por Reuters, en el marco de la cumbre de la OTAN, el presidente fortalecerá la cooperación en seguridad, cadenas de suministro y el conflicto en Ucrania con la alianza, así como enviará mensajes más fuertes a Corea del Norte. Además, se prevé que se aprueben documentos de cooperación entre Seúl y la OTAN en 11 esferas, incluyendo la no proliferación nuclear y la ciberseguridad.
La presencia del presidente surcoreano "reforzaría la cooperación con la OTAN ante la escalada de amenazas nucleares y de misiles por parte de Corea del Norte, y enviaría una advertencia unida de que la comunidad internacional no tolerará las actividades ilegales de Corea del Norte", afirmó el viceasesor principal para la Seguridad Nacional de Seúl, Kim Tae-hyo.
Asimismo, el funcionario dijo que Corea del Sur "planea contribuir a la paz en Ucrania, que es una de las cuestiones más importantes para la comunidad internacional", recoge Yonhap.