Este domingo, múltiples medios occidentales informaron que Estados Unidos, Francia y el Reino Unido dieron luz verde a Ucrania para emplear misiles de largo alcance en ataques dentro del territorio ruso. La decisión supone un cambio drástico en la política que hasta ahora mantenía el presidente de EE.UU., Joe Biden, quien, según informó The New York Times, había resistido las peticiones de Kiev de utilizar estas armas. La noticia también fue confirmada por el diario francés Le Figaro, que reportó la autorización a Ucrania de usar misiles Storm Shadow/SCALP por parte de París y Londres.
Según fuentes citadas por The New York Times, la primera acción podría dirigirse contra "tropas rusas y norcoreanas en defensa de las fuerzas ucranianas en la provincia de Kursk, en el oeste de Rusia". No obstante, hasta el momento, Rusia no ha confirmado la presencia de tropas norcoreanas en esa región.
Misiles de largo alcance en acción
El despliegue incluiría misiles ATACMS de fabricación estadounidense, con un alcance de 300 kilómetros, así como los Storm Shadow/SCALP, capaces de alcanzar más de 250 kilómetros. Esto, según los funcionarios citados, busca enviar un mensaje de vulnerabilidad a las fuerzas norcoreanas, pero no se espera que cambie radicalmente el curso del conflicto entre Kiev y Moscú.
Reacciones internacionales y advertencias de Putin
La decisión ha levantado fuertes críticas y preocupaciones de escalada militar. La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, recordó las advertencias del presidente Vladímir Putin, quien afirmó que permitir ataques en territorio ruso con armas de largo alcance podría ser considerado como una implicación directa de la OTAN en la guerra. "Con vistas a cambiar la naturaleza del conflicto, tomaremos la decisión adecuada en función de las amenazas que se nos planteen", advirtió Putin en septiembre.
El presidente de Lituania, Gitanas Nauseda, confirmó el permiso otorgado a Ucrania, calificando el momento como "decisivo en la lucha contra Rusia". Por su parte, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, criticó a Occidente, afirmando que ha entrado en una "fase de locura".
Reacciones en EE.UU.
La autorización ha provocado una oleada de reacciones en el ámbito político estadounidense. La congresista Marjorie Taylor Greene y figuras como Donald Trump Jr. y Robert F. Kennedy Jr. acusaron al presidente Biden de intentar escalar el conflicto hacia una potencial Tercera Guerra Mundial antes de abandonar la Casa Blanca. "El complejo militar industrial parece querer asegurarse de que ponen en marcha la Tercera Guerra Mundial antes de que mi padre tenga la oportunidad de crear la paz", comentó Trump Jr.
Conclusión
Mientras las tensiones aumentan, Ucrania no ha confirmado ni desmentido la autorización, y el presidente Volodímir Zelenski ha señalado que "los misiles hablarán por sí mismos". Las implicaciones de esta decisión podrían definir el curso del conflicto en Ucrania y su impacto en la geopolítica global.