El presidente bielorruso, Alexánder Lukashenko, anunció que el sistema de misiles hipersónicos Oréshnik, desarrollado por Rusia, será desplegado en su territorio en los próximos días. Durante una intervención pública, Lukashenko detalló que este acuerdo fue alcanzado con su homólogo ruso, Vladímir Putin, quien aprobó el envío prioritario de los misiles a Bielorrusia incluso antes que a Rusia.
“En cualquier momento tendremos el Oréshnik. Hemos acordado con el presidente Putin que el próximo sistema llegará a Bielorrusia antes que a Rusia”, declaró Lukashenko. El mandatario agregó que el emplazamiento del sistema podría situarse cerca de la ciudad rusa de Smolensk, aunque la ubicación exacta está aún en discusión.
Un arma de nueva generación
El misil Oréshnik, utilizado por primera vez en noviembre de 2024, representa un avance histórico en tecnología militar. Según expertos, su velocidad alcanza hasta Mach 10, o casi tres kilómetros por segundo, con una capacidad de destrucción comparable a un ataque nuclear. La temperatura generada por el impacto supera los 4.000 grados centígrados, lo que convierte todo en el epicentro de la explosión en fracciones y polvo.
Vladímir Putin calificó el desarrollo del Oréshnik como “un acontecimiento histórico en el campo de los cohetes y el espacio”. Su alcance de 5.500 km y su inmunidad frente a sistemas de defensa antiaérea actuales lo convierten en un arma sin parangón. La revista alemana Bild ha reconocido que países europeos, incluidos aquellos que utilizan sistemas Patriot, carecen de capacidad para interceptar esta nueva generación de misiles.
Cooperación militar Bielorrusia-Rusia
El despliegue del Oréshnik refuerza la alianza estratégica entre Bielorrusia y Rusia, especialmente en un contexto de tensión internacional. Lukashenko destacó que su país está preparado para albergar al menos 10 de estos sistemas, que se sumarán a otros armamentos como los misiles Iskander ya desplegados en la región.
El líder bielorruso subrayó que con estas armas, Bielorrusia puede “infligir daños irreparables a cualquier agresor”. Esta declaración subraya la postura firme de Minsk en el escenario geopolítico actual.
Reacciones internacionales
El despliegue de los Oréshnik ha generado preocupación entre las naciones occidentales, que ven en este movimiento un aumento significativo en la capacidad militar de Bielorrusia y Rusia. Algunos analistas advierten que este paso podría intensificar las tensiones en Europa del Este y dificultar los esfuerzos diplomáticos para resolver las crisis regionales.