La empleada de Red Bull que acusó a Christian Horner, de "comportamiento inadecuado", fue suspendida luego de que el británico fuera absuelto al término de una investigación interna, según informó a AFP una fuente cercana al caso.
Precisando que esta suspensión era una consecuencia directa de la investigación interna ahora cerrada.
"Red Bull no puede hacer ningún comentario sobre la situación individual de un empleado de la empresa", comentó la escudería campeona del mundo el jueves, día de los primeros entrenamientos libres del Gran Premio de Arabia Saudita en Yeda.
Luego de una investigación interna cuya apertura fue anunciada el 5 de febrero, el consejo de administración de la firma austríaca rechazó el miércoles pasado la queja de esta empleada y mantuvo su confianza en el patrón del equipo con fábrica en Milton Keynes, Reino Unido.
Esta decisión fue criticada por la falta de transparencia del proceso, en especial por escuderías rivales.
El día siguiente, un correo anónimo que contenía mensajes que supuestamente implicaban a Horner, fue enviado a varios representantes de medios de comunicación que cubren la Fórmula 1, a responsables del deporte automóvil o a escuderías rivales. El contenido de ese correo no pudo ser verificado de forma independiente.
Al término del pasado Gran Premio de Baréin, ganado por el triple campeón del mundo Max Verstappen, su padre Jos Verstappen afirmó que el equipo iba a "explotar" si Horner mantenía su puesto.
El británico, que siempre ha negado los hechos reprochados, dijo estar convencido tras el GP inaugural de la temporada de que su puesto no estaba amenazado por las consecuencias de la investigación.